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Análisis

¿Por qué los resultados de la oposición en Venezuela se pueden comprobar y los del CNE no?

Por Sol Amaya, Sebastián Jiménez Valencia, Jhasua Razo

(CNN Español) -- Un análisis de varios expertos a pedido de CNN de los resultados ofrecidos tanto por el Consejo Nacional Electoral (CNE) como por el opositor Comando Con Venezuela de las elecciones presidenciales de ese país concluye que los números que dan como ganador al presidente Nicolás Maduro “son una improbabilidad estadística”, mientras que los datos publicados en un portal web por los representantes del candidato Edmundo González Urrutia cuadran “matemática y estadísticamente”.

Desde hace diez días, el país caribeño se encuentra en vilo después de los resultados anunciados por el CNE, un organismo controlado por el chavismo, que gobierna desde hace 25 años. Aún no hay una definición concreta sobre la veracidad de los resultados: tanto la oposición como el oficialismo se adjudican el triunfo. ¿Cuán verificables son los datos presentados por cada una de las partes? Si bien las autoridades electorales y judiciales anunciaron la victoria de Nicolás Maduro, no han mostrado los resultados detallados por centro y mesa de votación para sustentarlo. En tanto, la oposición publicó en una página web el cómputo del 83,50% de las actas de escrutinio, un resultado que también ha sido verificado por organizaciones civiles y medios de comunicación independientes. Estas son las cifras.

Los números del oficialismo

Nueve minutos después del comienzo del lunes 29 de julio, el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, proclamó ganador de la contienda a Nicolás Maduro. Según los datos de ese organismo, con el 80% de las actas escrutadas, el mandatario había obtenido 51.20%, es decir exactamente 5.150.092 votos. En ese mismo primer boletín, el CNE le daba el segundo lugar a Edmundo González con 44,2%, exactamente 4.445.978 votos.

En tanto, el CNE organismo electoral aseguraba que la suma de los sufragios de los restantes candidatos de oposición representaba “462.704 de los votos, equivalente a un 4.06%”. A la vez, Amoroso informaba que pediría a la Fiscalía investigar una supuesta agresión al sistema de transmisión de datos, que, según denunció el lunes el fiscal general, Tarek William Saab, provenía de servidores ubicados en Macedonia del Norte. El martes, el Gobierno del país balcánico negó haber recibido una solicitud de las autoridades venezolanas para que investiguen el caso.

“Hay aproximadamente 1 probabilidad en 100 millones de que este patrón particular ocurra por casualidad”, dijo Andrew Gelman, profesor en Estadística y Ciencia Política de la Universidad de Columbia, en una publicación que analiza las cifras recogidas del primer informe del CNE.

Gelman realizó una simulación matemática con un modelo de probabilidad y concluyó: “Un millón de simulaciones y ni una sola vez funciona esto del redondeo”.

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A esa misma conclusión llegó David Arroyo Fernández, profesor universitario, economista colegiado y estadístico del Colegio de Economistas de Madrid, al ser consultado por CNN. Tras un análisis matemático, Arroyo dice: “Una probabilidad tan baja —de que las cifras tuvieran un solo decimal— ‘aconseja’ asumir parcialidad o sesgo en los resultados”.

Para John Magdaleno, politólogo y director de la consultora en asuntos públicos Polity, las inconsistencias van desde lo que ha presentado el CNE — no ha publicado aún los resultados electorales mesa por mesa, como ordena la Ley Orgánica de Procesos Electorales— como en las cifras.

Magdaleno destacó cuatro deficiencias técnicas en el primer boletín del CNE: primero, no se anunció el número absoluto y relativo de votos nulos; segundo, se sumaron los votos de todos los candidatos presidenciales distintos de González Urrutia y Maduro “en lugar de presentarlos por separado, como es habitual”; tercero, las frecuencias se presentaron con un solo decimal, “lo cual no es común”; y cuarto, con el 80% escrutado se declaró una tendencia irreversible a favor de Maduro, aunque la diferencia reportada era de poco más de 704.000 votos y quedaban al menos 2.300.000 votos por contar.

El viernes 2 de agosto, el organismo electoral publicó un segundo boletín que aseguraba que, tras procesar el 96,87% de las actas, Maduro obtuvo 51,95% de los votos mientras que González Urrutia, alcanzó el 43,18%. Tampoco hicieron públicos los datos que respaldan ese boletín.

“Los datos que publica la CNE no son auditables porque son datos generales de participación y de candidatos, pero no los datos disgregados ni la base de datos para entender cómo llegó al cálculo”, dijo a CNN Eugenio Martínez, director del portal Votoscopio. Además, “el primer boletín está redondeado al primer decimal, eso es aritméticamente imposible que ocurra”, señaló.

John Magdaleno señaló que como el segundo boletín anunció un total de 12.335.884 votos válidos, “se deduce que en el primer boletín faltaban por computar más de 2.300.000 votos”. Esto, según Magdaleno, confirma “la inconsistencia central del primer boletín”: no se podría hablar de tendencia irreversible.

Para Martínez, “hay muchas irregularidades en el comportamiento del CNE”. Por un lado, no se hicieron “dos de las auditorias esenciales después de la elección que tiene que hacerse para validar los resultados y que están en el cronograma de organización de las elecciones”, dijo.

Martínez explicó que se trata de la auditoria de telecomunicaciones, que tenía que haberse hecho el lunes 29 de julio, que sirve “para comprobar que el resultado que transmiten las máquinas se corresponde con el resultado que recibió el CNE en la sala de totalización”; y la auditoria de verificación fase 2, que tenía que hacerse el viernes 2 de agosto, que consiste en “tomar muestra aleatoria de 1% de las máquinas para comprobar que el hardware y software auditados antes de la elección se mantienen íntegros” y “para verificar que el resultado que se imprimió en el acta de escrutinio coincide con los comprobantes de voto y que ambos coinciden con los resultados que publica mesa por mesa el CNE”.

Los números que presentó la oposición

El viernes 2 de agosto, la oposición divulgó una base de datos que ha ido actualizando.

Hasta el miércoles 7 de agosto, momento de la redacción de este artículo, contenía el 83,50 % de las actas (25.073) de un total de 30.026 mesas. Según estos datos, Edmundo González habría ganado la elección con 7.303.480 votos (67%), mientras que Maduro habría quedado en segundo lugar con 3.316.142 votos (30%) y los otros candidatos sólo obtuvieron 267.640 votos (2%).

“Si se descarga la base de datos se puede hacer un análisis de cómo llegan al anuncio de votación global que hacen y por eso los datos de la oposición son verificables y los del CNE no”, aseguró Martínez.

En efecto, en la mencionada web puede descargarse la base, que contiene los datos desagregados de la votación con links que dirigen a imágenes de las actas escaneadas.

Para verificar que un acta es válida, lo que se debe revisar es que tengan un código QR, los votos desglosados por candidato y las firmas de los representantes de los partidos, un representante del organismo electoral y otro de los testigos electorales que participaron por sorteo.

El profesor David Arroyo Fernández, del Colegio de Economistas de Madrid, hizo un estudio estadístico de los datos publicados por la oposición y concluye que “es muy poco probable" que ellos hayan contado con el tiempo suficiente "para haber creado una distribución de votos con estas características en tan solo unos días” si no fueran los datos reales, por lo que “matemática y estadísticamente los datos [de la oposición] cuadran en cuanto a cifras y la exactitud mostrada”.

Por su parte, John Madgaleno señala que “la oposición ha presentado información más detallada y verificable del resultado de la elección presidencial que el organismo encargado de la administración del evento electoral”.

Este lunes 5 de agosto, el Ministerio Público de Venezuela abrió una investigación penal contra González Urrutia y la líder opositora María Corina Machado por "la presunta comisión de los delitos de usurpación de funciones, difusión de información falsa para causar zozobra, instigación a la desobediencia de las leyes, instigación a la insurrección, asociación para delinquir y conspiración".

El organismo adujo que la acusación se vincula al llamado que los líderes opositores hicieron en un comunicado a los militares y a los policías a ponerse "al lado del pueblo". Pero también sostuvo que “falsamente anuncian un ganador de las elecciones presidenciales distinto al proclamado por el Consejo Nacional Electoral”.

Varios medios y organismos internacionales analizaron la base de datos ofrecida por la oposición venezolana. Uno de ellos fue la Misión de Observación Electoral de Colombia (MOE).

Según este organismo “el cálculo de la participación electoral que está en la base de datos es consistente con los datos presentados por el CNE Venezolano”. Tras analizar la información contenida en la base de datos, la MOE valida los resultados que dan como ganador a González Urrutia.

The Associated Press (AP) procesó casi 24.000 imágenes de actas de escrutinio difundidas por la oposición, que representan los resultados del 79% de las máquinas de votación. Cada hoja codificada de votos cuenta en códigos QR, que AP decodificó y analizó programáticamente, lo que resultó en tabulaciones de 10,26 millones de votos.

Según esos cálculos, el opositor Edmundo González recibió 6,89 millones de votos y Maduro obtuvo 3,13 millones.

A la misma conclusión llegaron medios periodísticos como The Washington Post, The New York Times y El País, que hicieron sus propios análisis sobre los datos difundidos por la oposición mayoritaria de Venezuela y concluyeron que la información sostiene el triunfo de González Urrutia sobre Maduro.

Washington Post dice que González ganó las elecciones de Venezuela 2:00

¿Cómo consiguió la oposición estas actas?

Miles de voluntarios participaron del proceso electoral del 28 de julio. La instrucción, que la propia Machado reiteró ese domingo tras al cierre de urnas, era que se quedaran en los centros de votación hasta obtener una copia de las actas impresa. Luego estas fueron trasladas a un lugar seguro, con el acompañamiento de miembros del partido opositor que buscaban garantizar la seguridad de los testigos.

¿Qué pasa con el porcentaje de las actas a las que la oposición no pudo acceder? ¿Podrían dar vuelta el resultado? Aún si el 100% de los votos contenidos en las actas faltantes fueran favorables a Maduro, la cuenta, según los datos publicados por la oposición, seguiría dando ganador a González Urrutia.

En esa línea se expresó Marina Lacalle, profesora de la maestría en Relaciones Internacionales de la Escuela de Gobierno de la Universidad Austral. "Teniendo en cuenta que la elección presidencial en Venezuela se resuelve por mayoría relativa, es muy difícil revertir una tendencia de casi 70% de los votos", dijo a CNN.

"Por otro lado, habría que ver de qué zonas geográficas (y con qué características sociodemográficas) son las actas que faltan visibilizar y contabilizar. Como se desprende de los datos provistos por las actas publicadas, Maduro habría sacado más votos en aquellos sectores más vulnerables en términos socio económicos, como ha sido en elecciones pasadas", añadió la especialista.

¿Qué pasará ahora?

El Tribunal Supremo de Justicia, órgano que responde al oficialismo, había dado al CNE tres días para presentar las actas. El plazo se cumplió este lunes y según el órgano judicial el CNE entregó lo solicitado y se comenzó un proceso de peritaje que incluye citatorios para los 10 candidatos presidenciales, entre ellos Maduro y González Urrutia. Este miércoles González Urrutia comunicó en sus redes que no asistiría a la Sala Electoral porque estaría "en situación de absoluta indefensión".

Edmundo González no asiste a la cita del alto tribunal 4:02

Acerca de los autores

Sol Amaya

Sol Amaya es editora de CNN en Español. Forma parte del equipo de CNNE desde 2021. Entre 2008 y 2021 trabajó en el diario La Nación, de Argentina, como editora y redactora de breaking news, especializada noticias policiales y temáticas vinculadas a la migración.

Sebastián Jiménez Valencia

Sebastián Jiménez Valencia es editor sénior digital de CNN en Español. Forma parte de CNN desde 2011. Ha participado en la consolidación del crecimiento de CNN en Español como líder de noticias en español en redes sociales y la expansión digital de la marca. Ha cubierto la Cumbre de las Américas, el proceso de paz en Colombia y varias elecciones en la región. Es autor de la novela El raudal de la nostalgia, inspirada parcialmente en la historia de la tragedia de Armero en Colombia. 

Jhasua Razo

Jhasua Razo es editor visual en CNN en Español. Ha trabajado para el periódico El Universal y El Financiero en México y la plataforma CONNECTAS en Colombia. Obtuvo en 2019 el Premio Ortega y Gasset en la categoría Multimedia por el trabajo "La Generación del Hambre" y en 2021 el Premio Nacional de Periodismo en México en cobertura multiformato por la investigación "Obras negras, blanco del crimen organizado en Cancún".